¿qué hago aquí?


Hace unos días escuché a alguien comentar que estamos en donde no deseamos estar o vamos a donde no deseamos ir por uno de dos motivos: los hijos o drogas.

Partiendo de esto... me quedé pensando (por ahí me da de vez en cuando)... Recordé cuando por motivos personales  me vi renunciando al trabajo en donde estaba, aunque con mucho pesar lo hice, consideré que todo tiene un motivo y que tal vez sería mejor para nosotros.
Mi familia y yo nos vimos en problemas fuertes pero... no hubo un despropósito de Dios en todo lo que sufrimos,  aunque... yo terminé aceptando ir a una empresa que consideraba mi última opción.
El tiempo era malo, en esos meses es cuando menos trabajo hay y la entrada de los niños a la escuela estaba encima.. Tuve que ir a dónde no quería por ellos.
El día que me entrevistaron  para contratarme y aquella ejecutiva me preguntó ¿por qué quiere trabajar con nosotros? mi respuesta fue: "¡Porque tengo dos hijos!  Por ellos me esforzaré  y haré bien mi trabajo."
Y así fue como me quedé trabajando en una empresa con bajo salario y buenas prestaciones que para consuelo compensan un poco el salario tan bajo.
A todo se adapta una... menos a no comer. Aunque extraño el otro ambiente, a mis otras compañeras y sobre todo el otro salario; me he ido acoplando a este nuevo grupo de gentes en su mayoría mujeres, mujeres admirables que son madre y padre, que dejan a sus hijos solos o en una guardería y parten con su corazón compungido a trabajar para sostenerlos... porque Ellos son su motivo, son el motivo que las mantiene en donde algunas no quieren estar.
O te adaptas o renuncias! No hay vuelta de hoja.
Pero ¿cuándo renuncia una madre?
Aclarando: No digo que no me guste hacer mi trabajo, claro que me gusta y lo encuentro interesante pero sé que tengo capacidad para algo mejor. Me gustaría crecer en esta empresa, avanzar y probar que tengo más capacidades, probarme a mí misma hasta dónde puedo llegar. Ojalá tuviera esa oportunidad.
¿Qué te hace salir avante? ¡La visión de lo que deseas!
Yo deseo para mis hijos una vida mejor; yo deseo para mí, una mejor oportunidad; deseo para nosotros... ¡La paz mundial!  Ups... me resbalé...Hasta miraba las flores caer y la corona sobre mi cabeza, pero bueno, fue un resbalón.
 Ayer mismo le decía a una compañera algo más o menos así: "Ponte un valor. Amate y siéntete valiosa. No te pongas un precio sino un valor... cuando logres amarte y valórate a ti misma, no necesitarás a un hombre contigo ni soportarás que te maltrate. Cuando por fin te ames a ti misma y pongas tu autoestima en su lugar, sabrás que puedes sola salir adelante, sabrás que puedes con tus hijos como lo han hecho muchas de las mujeres que conoces, y entonces el hombre que esté a tu lado reconocerá tu valor y te respetará."
¿Qué hace a alguna mujer estar en dónde no desea estar? El miedo, el miedo a no poder sola con la responsabilidad de sus hijos.

Hay mujeres que  todavía no conocen el espíritu de guerrera que poseen, pero yo lo veo a través de sus ojos.

¡Eres una mujer valiente e inteligente, claro que puedes!

¿Qué hacemos aquí? Vivimos luchando.
¿Qué hago aquí?
Guardo la esperanza, mientras lucho amando a mi familia, contando con mi marido y animándolo a levantarse cuando lo cansa la lucha y se deja caer y sobre todo buscando el cobijo de mi Señor.

Aquí Keruso.... ¿quien se tomo mi café?

No hay comentarios: